¿Te has preguntado cómo es que en
ocasiones no hay respuesta alguna a tus padecimientos fisiológicos? El cuerpo
humano es tan maravilloso que nos alerta en todo momento, él expresa lo que
ignoramos en nuestro interior. No solo nos avisa cuando debemos alimentarlo o
cuando debe descansar, sino también las situaciones de conflicto por las que
estamos pasando. Nos manda señales de lo que sentimos, pensamos o hacemos y lo
genera como un aprendizaje. Así mismo como aprendemos a protegernos o evitar lo
que nos desagrada, nuestro organismo nos protege o nos avisa que algo no anda
bien.
En la actualidad ya se cuenta con
suficientes evidencias que comprueban que nuestros procesos mentales están ligados
con los fisiológicos y neuronales.
Por medio de las enfermedades
nuestro cuerpo reacciona ante situaciones o conflictos no resueltos, siendo el
reflejo del problema padecimientos; como la gripe, alergias, resfríos, enfermedades
cardiovasculares desórdenes gastrointestinales, migrañas, convulsiones, dolores
crónicos entre otros.
¿Cuál es la explicación de esto?
Existe un vínculo fisiológico directo entre las emociones y el sistema inmunológico,
por lo tanto, si nuestra vida emocional se ve dañada nuestras defensas
disminuyen; posiblemente pienses que no es tu caso, la respuesta está en que
toda persona es distinta, hay individuos
más vulnerables que otros, todos experimentamos reacciones, vivencias o
experiencias diferentes.
Así que, antes de acudir con el
médico en una búsqueda constante de respuestas cuestiónate acerca de tu estilo
de vida, de esta manera será más fácil identificar si tu padecimiento se deriva
de algún conflicto emocional.
Cuida tu cuerpo y tu mente, esto contribuirá
a que tengas una vida plena y recuerda:
¡ Tu cuerpo es el espejo de tu
vida!
No hay comentarios:
Publicar un comentario